Descubre técnicas y trucos para aprender a dibujar manos de manera lúdica.
El dibujo de manos es un tema apasionante que ha asustado a más de un artista a lo largo de la historia.
Un maestro en este arte era Alberto Durero (siglo XV). Además de dibujar, hacía grabados que influenciaron múltiples artistas, hasta los expresionistas alemanes de principio del XX. En sus pinturas y dibujos, sus manos parecen real.
Las manos, pues, son una fuente de inspiración sin límites .
En la mayoría de tutoriales, la enseñanza del dibujo de manos queda muy académico. Al cabo de 10 minutos puede que nos hayamos aburrido con nuestra mano tendida encima de la mesa. Habremos aprendido que la mano se encuentra en la extremidad de nuestro brazo, tiene 5 dedos, pero esto ya lo sabíamos.
¿Hace falta tener conocimientos de anatomía o de medicina para dibujar manos?
Con algunas reglas básicas como afilar nuestro sentido de la observación y atrevernos, el dibujo de manos puede convertirse en un juego divertido, un tema inagotable para experimentar técnicas y herramientas, en lugar de un campo de batalla que ha desanimado a más de uno.
1- Para empezar, hay que concentrarse y aprender a ver, más bien a observar nuestra mano.
2- Luego intentar olvidar que estamos dibujando una mano, y lo complicado que puede ser, para centrarnos en la forma que vemos.
3- Así mismo, antes de empezar a dibujar procuraremos entender cómo esta forma está construida. Una vez reunidas todas estas condiciones, ya podemos empezar a dibujar.
4- Y lo haremos de la forma general al detalle. Es decir, una vez dibujada la forma de nuestra mano, rellenaremos el interior con los detalles que vemos.
Y continuaremos nuestro ejercicio de manos, explorando técnicas diferentes, como la línea continua, (dibujar sin soltar el rotulador del papel), dibujar sin mirar nuestro cuaderno, (este método fomenta la coordinación de la mano con la mirada), dibujo con mano opuesta, (invitación a la línea torpe pero expresiva), o dibujo con las 2 manos, etc.
Lo importante es experimentar.